
En pleno 11 de junio de 2024, el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, expresó su entusiasmo y el de los aficionados al fútbol de todo el mundo, al declarar que están “contando los días” para la Copa Mundial de la FIFA 2026. Este certamen se llevará a cabo en México, Estados Unidos y Canadá, con el partido inaugural en el mítico Estadio Azteca.
A dos años del inicio de la Copa del Mundo, Infantino afirmó que la XXIII edición del torneo, que comenzará el 11 de junio de 2026 en el emblemático Estadio Azteca de Ciudad de México, será “el evento más grande, el espectáculo más grande, el torneo más grande que el mundo haya visto jamás”.
Destacó que será el Mundial más inclusivo de la historia, con una cifra récord de 48 equipos participantes y 16 ciudades sede repartidas por los tres países de Norteamérica.
“Dentro de dos años, el mundo se paralizará para ver lo que está pasando en Norteamérica. El trofeo ya está aquí, listo, nosotros nos ocupamos de él, y todos nos estamos preparando, con la vista puesta en la competición, disponiéndolo todo”
El presidente de la FIFA también enfatizó el hito histórico que cumplirá el Estadio Azteca al convertirse en el primer recinto en albergar tres Copas del Mundo, tras haber sido sede de partidos en las ediciones de 1970 y 1986.
“Será el primer estadio en albergar tres partidos inaugurales de la Copa Mundial. Esto no lo habíamos visto nunca, y vivirlo en un estadio tan emblemático como el Azteca es algo muy especial. Todos conocemos los partidos épicos, los partidos de la Copa Mundial [de la FIFA] que se han disputado aquí en el pasado, los campeones absolutos como Pelé y Diego Maradona que jugaron y ganaron en el Azteca”
A pesar del entusiasmo de Gianni Infantino, la decisión de incluir 48 equipos y extender la sede a tres países ha generado críticas sobre la logística y la calidad del torneo.
Algunos aficionados y expertos argumentan que la expansión podría diluir el nivel de competencia y que el enfoque en grandes eventos y estadios emblemáticos como el Azteca podría desviar la atención de problemas fundamentales como la equidad y el desarrollo del fútbol en países menos privilegiados.