Celaya, Guanajuato
El vocero de la Diócesis de Celaya, padre José de Jesús Palacios Torres, señaló que el informe de actividades del gobierno municipal no debe convertirse en una fiesta de logros, sino en un ejercicio objetivo que sirva como examen de conciencia. Dijo que además de reconocer los avances, es importante que las autoridades tengan la humildad de admitir lo que aún está pendiente por hacer.
El sacerdote resaltó que estos ejercicios deben resaltar por su veracidad, pues en caso de no dar información real, no solo se engaña a la sociedad, sino a sí mismos, además, resaltó que los informes no deben ser sinónimo de gastos y excesos.
“Yo creo que lo importante es que se esté trabajando. Yo entiendo que en una sociedad es muy difícil tenerlos contentos a todos y también entiendo que una realidad es decir que la sociedad como tal que va creciendo cada vez está más rebasada y entonces pues obviamente a favor cada vez tendría que tener mayores esfuerzos.
Yo creo que el informe tiene que dar pauta a no hacer una fiesta de logros, sino más bien hacer como un examen de conciencia de aquello que no sea ha hecho, aunque también venga el reconocimiento de lo que sí se hizo”
José de Jesús Palacios Torres, vocero de la Diócesis de Celay
Respecto a la relación de la Diócesis con la actual administración municipal de Celaya, comentó que ha sido positiva y con apertura al diálogo, aunque reconoció que en algunos temas de logística y organización interna todavía se están ajustando los mecanismos de atención.
Asimismo, el vocero precisó que, hasta el momento, la Diócesis no ha recibido una invitación formal para que el obispo o un representante acuda al informe del alcalde Juan Miguel Ramírez Sánchez, que se realizará el 20 de septiembre, pero aún hay tiempo para ello.n se viva como una experiencia de fe y no como un simple desfile cultural.




