Redacción: Pablo Gómez
El 18 de septiembre, Rodrigo Huescas vivió un partido muy importante de su joven carrera. El futbolista mexicano debutó en la UEFA Champions League con el FC Copenhague. Lo hizo con una actuación increible, siendo titular los 90 minutos. Fue un gran apoyo por la banda derecha y, como broche de oro, una asistencia que levantó al público del Parken Stadium.
No tuvo un rivl cualquiera. Se trató nada más ni nada menos que con el “Bayer Leverkusen”, equipo ex campeón de la Bundesliga y considerado uno de los clubes más sólidos de Europa. Lejos de intimidarse, Huescas mostró personalidad desde el inicio. Cerró espacios en defensa y se sumó con criterio al ataque.
El joven mexicano de 22 años, canterano del Cruz Azul, al minuto 85, cuando el partido parecía irse en empate, tomó el balón. Levantó la cabeza y mandó un centro preciso al área. La pelota encontró la frente de su compañero Robert Vínicius Silva, quien la envió al fondo de la red para el 2-1. El estadio explotó y los reflectores apuntaron al mexicano que, en su primera noche europea, ya había dejado huella.
Su huella en la Champions
En las últimas tres ediciones de la Champions League, han jugado un canterano del equipo Cruz Azul. En los dos últimos torneos fue Santiago Gimenez y Rodrigo Huescas se convirtió en el tercero.
Con un final amargo, pero un debut prometedor, aunque el triunfo se escapó en los minutos finales con un autogol que decretó el 2-2. La actuación de Huescas no pasó desapercibida. Su aporte ofensivo y solidez defensiva fueron reconocidos tanto por la prensa local como por los propios aficionados daneses.
Con este arranque, Rodrigo Huescas se suma a la lista de futbolistas mexicanos que han dejado su huella en la Champions League. Más allá del resultado, su actuación envía un mensaje claro.
"Está listo para competir en la élite europea y convertirse en referente tanto de su club como de la Selección Mexicana.”




