Celaya, Guanajuato
En medio del debate nacional por las nuevas disposiciones aplicadas en la Ciudad de México; en Celaya se revisa el impacto que tendría replicar medidas como la prohibición del transporte de pasajeros en motocicleta y la obligación de portar número de placa en chaleco y casco. El análisis local parte de reconocer que, cuando se imponen restricciones absolutas, la actividad suele continuar de manera irregular, generando un escenario más riesgoso para usuarios y operadores.
Desde la dirección de Tránsito se impulsa una salida basada en la regulación, no en la prohibición. La propuesta plantea ordenar la actividad mediante requisitos claros:
- Motocicletas en buenas condiciones
- Uso correcto de casco, chalecos fluorescentes
- Documentos en regla
- Medidas que permitan identificar a quienes ofrecen el servicio.
Además, se busca un acercamiento directo con plataformas para acordar lineamientos que den certeza y seguridad, evitando que prestadores no vinculados a estas aplicaciones se sumen sin control y aumenten los riesgos.
“Yo creo que lo mejor es regular y pones medidas, pones candados de seguridad como es el chaleco florescente con un número ya sea de placa o a lo mejor un número de autorización para que la gente sepa que es seguro el viaje en este tipo de vehículo o cuando menos que es de la plataforma y que no es un pirata, aunque ahorita son piratas, pero que no es un pirata que esté prestándole el servicio y que sea seguro.
¿Ha habido algún tipo de acercamiento con quienes prestan estos servicios y se les ha organizado mediante algún tipo de comisión?
Martín Filiberto García Medina, Tránsito y Policía Vial de Celaya
Tengo pendiente una reunión con una representante de la plataforma que es la senior en ese ramo y quedamos pendientes de una reunión. Yo creo que en esta próxima semana tenemos el acercamiento, platicamos porque yo voy con la idea de que lo regulen. Mi postura en el foro de hace ocho días”
La postura ya fue comunicada ante el Congreso del Estado, donde se expuso la necesidad de una legislación responsable que permita organizar, regular y estandarizar el servicio.
En Celaya se apuesta por fortalecer medidas de seguridad, reducir la operación informal y garantizar condiciones adecuadas para pasajeros y conductores. El camino, aseguran, está en profesionalizar este tipo de transporte, completar las regulaciones pendientes y frenar prácticas que aún operan sin orden.




