Un voraz incendio se desató la tarde del miércoles 26 de noviembre en el complejo residencial Wang Fuk Court, ubicado en el distrito Tai Po District, en los Nuevos Territorios de Hong Kong. El fuego rápidamente envolvió varios edificios de gran altura, provocando una tragedia que ha sido catalogada como una de las peores de los últimos años en la ciudad.
El complejo residencial consta de ocho torres de aproximadamente 31 pisos, con cerca de 2,000 departamentos. Este da hogar a unas 4,800 personas, de acuerdo con registros oficiales.
Las llamas comenzaron alrededor de media tarde, en lo que parecía ser el andamiaje de bambú instalado en el exterior de uno de los edificios que estaban en proceso de renovación. Como consecuencia del material inflamable y las condiciones de viento, el incendio se propagó con extrema rapidez.
El implacable incendio
Alrededor de 14:51 (hora local): Se reciben los primeros llamados al servicio de emergencias. Se reporta humo y llamas en el complejo residencial Wang Fuk Court.
El fuego, que habría comenzado en los andamios de bambú y redes de construcción que cubrían uno de los edificios en renovación, se propaga con rapidez por el exterior.
Cerca de las 15:34, las autoridades elevan la alerta a “alarma nivel 4” conforme el incendio se extiende. Las llamas y el humo envuelven varias torres del complejo. Se informa que residentes quedan atrapados, algunos huyen por escaleras llenas de humo, otros reciben indicación de permanecer dentro de sus departamentos y cerrar puertas ante la peligrosidad.
Alrededor de las 18:20 la alerta se eleva a “alarma nivel 5”, el grado más grave de emergencia en Hong Kong.
Durante la noche y hasta la madrugada del 27 de noviembre continúan las operaciones de rescate y extinción del fuego. Más de 140 camiones de bomberos y decenas de ambulancias, junto con cientos de bomberos, trabajan para controlar el fuego y evacuar a los residentes.
Durante la madrugada del 27 de noviembre, el líder de la ciudad, John Lee, informó un balance preliminar, donde aseguró que al menos 36 personas fallecieron, entre ellas un bombero.
Víctimas, lesionados y daños materiales
Las cifras oficiales y extraoficiales varían, pero esto es lo que reportan los medios internacionales y locales hasta el momento:
- Confirmados al menos 36 fallecidos, entre ellos un bombero.
- Aproximadamente 279 personas reportadas como desaparecidas tras el incendio.
- Al menos 29 hospitalizados, de los cuales 7 se encuentran en estado crítico.
- Más de 700 residentes evacuados a refugios temporales.
En cuanto a pérdidas materiales, el incendio consumió amplias zonas de múltiples torres residenciales. Se reportan daños severos en muchos departamentos, andamios y estructuras de renovación, generando una destrucción significativa en el complejo habitacional. Además, se cerraron carreteras y se suspendieron servicios en la zona por emergencias.
Las autoridades han iniciado una investigación para determinar si se cumplieron las normas de seguridad, especialmente en lo relativo a los materiales de construcción y protección contra incendios, al tiempo que analizan si existió negligencia o incumplimiento de regulaciones.
Un residente de apellido So, entrevistado por agencias internacionales, describió la escena con angustia.
“No hay nada que podamos hacer por la propiedad. Solo podemos esperar que todos, jóvenes o viejos, regresen sanos y salvos”.
Otro vecino, de nombre Harry Cheung, de 66 años, quien vive en uno de los bloques afectados desde hace más de cuatro décadas, relató haber escuchado una fuerte explosión alrededor de las 14:45 (hora local). Al ver las llamas salió apresuradamente para empacar sus cosas.
“No sé ni cómo me siento ahora mismo. Solo pienso en dónde voy a dormir esta noche, probablemente no podré volver a casa”.




