Celaya, Guanajuato
Tras el ataque armado perpetrado en un balneario del municipio de Cortazar, donde murieron siete personas, entre ellas un menor de edad, el obispo de la Diócesis de Celaya, Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, lamentó que ahora la violencia haya entrado a un espacio recreativo como este y exhortó a la sociedad a no ver como algo común estos eventos.
El prelado resaltó que cada día son menos los espacios donde las familias pueden congregarse a convivir de manera sana y sin riesgos, por lo que exhortó a las autoridades de todos los niveles a procurar estos lugares y evitar que la delincuencia se apodere de ellos.
De la misma manera, lamentó lo ocurrido y envió su pésame a las personas que sufrieron la muerte de sus seres queridos, además ofreció el apoyo espiritual a los afectados, tanto por la agresión como quienes la presenciaron.
Asimismo, el obispo pidió a quienes delinquen y continúan generando mal y dolor a la sociedad a que tengan cuidado con la gente y respeten estos lugares de sana convivencia.
