Celaya, Guanajuato
La atención de la Policía Municipal a casos de violencia contra mujeres mantiene una tendencia sostenida, con 18 intervenciones recientes que reflejan la persistencia de agresiones físicas, verbales o psicológicas dentro del entorno familiar o cercano. Estos reportes suelen originarse en discusiones con parejas, hijos, vecinos o situaciones relacionadas con el consumo de alcohol.
Aunque la presencia policial permite contener los conflictos y canalizar a las afectadas hacia instancias correspondientes, la estadística muestra que la mayoría de los agresores pertenece al círculo familiar inmediato o son exparejas y conocidos, con edades que van desde jóvenes hasta adultos.
El despliegue operativo se concentra en separar a las partes, brindar asesoramiento y, cuando es necesario, remitir a los agresores ante un juez cívico. Sin embargo, el avance más sensible recae en la reincidencia: cuando un domicilio registra un segundo caso, se intensifica la atención para evitar que la violencia escale a un delito o tragedia.
Las intervenciones permiten activar canales de acompañamiento con áreas como DIF, INSMUJERES y Derechos Humanos, además de unidades especializadas que escoltan a las víctimas en todo el proceso ante Fiscalía y otras instituciones.
“El policía vaya a apoyarlas, permite que el policía se acerque y tenga esa intervención para poder ser canalizadas a una instancia correspondiente.
La mayoría de estas atenciones solamente es que el ciudadano se retire del lugar, que la persona que está agrediendo se retire del lugar, en otras ocasiones sí se requiere la intervención para remitirlo ante un juez cívico, como es el caso de que fueron dos, dos por temas de justicia cívica, y también tenemos en algunas otras ocasiones que la misma ciudadanía, las personas sí se animan a poner una denuncia ante fiscalía.
¿Qué porcentaje es el que sí se anima, director?
Bernardo Rafael Cajero Reyes, Director de la Policía de Celaya
Disculpe. Es muy bajo, tenemos alrededor de en la semana unas 18 atenciones, una persona se anima a poner la denuncia”
Aun con este esquema de respuesta, el punto crítico es la baja formalización de denuncias. De 18 atenciones semanales, apenas una mujer acude a Fiscalía, lo que limita el alcance legal y la contención de futuros riesgos.
La falta de motivación para denunciar, pese a la contundencia de varios casos, mantiene la problemática en un ciclo de alertamientos y contención inmediata sin la acción jurídica necesaria. Las autoridades insisten en que la denuncia es esencial para activar plenamente la red de protección disponible y garantizar una intervención que trascienda la inmediatez del conflicto.




