Celaya, Guanajuato
El Ayuntamiento de Celaya enfrenta un panorama financiero complejo, principalmente por el creciente gasto en salarios y prestaciones, que ya rebasa los ingresos municipales.
Actualmente, la administración destina más de mil cien millones de pesos anuales a nómina. Mientras, la recaudación total apenas alcanza los setecientos millones, lo que pone en riesgo la viabilidad de otros programas y acciones de gobierno.
De acuerdo con el alcalde, la situación se agravará hacia 2030, cuando el esquema vigente de pagos dejará de ser sostenible debido al incremento de jubilaciones y la presión presupuestal que estas representan.
Frente a ello, subrayó la necesidad de aplicar medidas urgentes de eficiencia administrativa, depuración de recursos y reformas al esquema laboral, con el objetivo de garantizar la estabilidad de las finanzas municipales.
“Ahora, aparte aquí es una cuestión bien especial.
A mí me entregaron lo que significa para el 2030 las jubilaciones. Cuando nosotros llegamos había como 500 y tantas jubilaciones o menos. Hoy hay 700 y tantas jubilaciones.
Para el 2030 va a haber mil y tantas jubilaciones. Entonces para el 2030 los recursos que hay no van a alcanzar”
El presidente municipal sostuvo que su administración mantendrá una línea firme en el manejo de la hacienda pública. En sus palabras, se privilegiará “el bienestar de la hacienda pública, sin golpearla, por encima de las necesidades o intereses particulares".
Dejó claro que cualquier decisión se tomará bajo un criterio de sustentabilidad financiera y responsabilidad institucional.




