¡La espera ha terminado y la celebración ha comenzado!
Los Diablos Rojos del México han roto una década de sequía y se han coronado campeones de la Liga Mexicana de Beisbol, logrando su título número 17.
En el Juego 4 de la Serie del Rey, los Pingos se impusieron 4-2 sobre los Sultanes de Monterrey. Concretaron una serie perfecta que marca el regreso del equipo a lo más alto del podio después de un largo período de espera desde su último campeonato en 2014.
Desde el primer inning, los Diablos mostraron su determinación y hambre de victoria. José Marmolejos, el slugger nacido en Nueva Jersey, desató su poder con un impresionante cuadrangular que trajo tres carreras al marcador.
Mientras que Diosbel Arias también cruzó el plato para poner el marcador 4-0 a favor de los visitantes. Este inicio arrollador estableció el tono para el resto del juego y evidenció la superioridad del equipo en esta serie decisiva.
Los Sultanes, por su parte, enfrentaron un desafío titánico. El equipo regio sufrió una inoperancia ofensiva tal que, a mitad del encuentro, acumulaban 28 entradas sin registrar una sola carrera.
Este estancamiento se hizo más evidente a lo largo de los tres partidos previos de la serie, donde la ofensiva de los Sultanes no logró encontrar el ritmo necesario para hacer frente a la sólida defensa de los Pingos.
A pesar de un repunte tardío en el noveno inning, donde los Sultanes finalmente lograron marcar dos carreras y acercarse al marcador, no fue suficiente para cambiar el destino del partido.
La ventaja tempranera de los Diablos fue decisiva, sellando un resultado final de 4-2 y asegurando el regreso a la gloria para la organización.
Con 87 victorias en la temporada, sumando 71 en la regular y 16 en los playoffs, los Diablos Rojos celebran su decimoséptimo título con un merecido orgullo y la promesa de más éxitos en el futuro.