SpaceX lanzó desde Boca Chica (Texas/EU) el cuarto vuelo de prueba del Starship, la nave más grande y más poderosa del mundo que busca alcanzar el espacio exterior.
Después de los dos intentos de 2023, que terminaron en explosiones, y de otro en marzo pasado en el que ninguna de las dos etapas lograron regresar a la Tierra.
El despegue ha sido en principio exitoso, especialmente porque aterrizó ya su propulsor Super Heavy en una plataforma de las aguas del Golfo de México, un hito que no había logrado.
Decenas de curiosos pernoctaron en la playa Isla Blanca, a 1.5 kilómetros de Starbase, el complejo espacial de Elon Musk, en Boca Chica, una ciudad fronteriza con el estado de Tamaulipas.
Niños, jóvenes, fotógrafos y familias completas aguardaron desde las primera horas este lanzamiento equipados con sombrillas, agua, comida y protector solar en un día en el que el termómetro rebasó los 31 grados, pero aseguraron valió completamente la pena, pues es una oportunidad única vivenciarlo.