Calificando de “deplorable” la práctica de vientres de alquiler, el papa Francisco hizo un llamado internacional el pasado lunes, para prohibir esta práctica.
El Santo Padre realizó estas declaraciones en su tradicional discurso de comienzo de año ante el cuerpo diplomático acreditado ante la Santa Sede.
“Considero deplorable la práctica de la llamada maternidad subrogada, que representa una grave violación de la dignidad de la mujer y del niño, basada en la explotación de situaciones de necesidad material de la madre”
En junio de 2022, el pontífice calificó la gestación subrogada de “inhumana”
El papa expresó que la vida del no nacido debe protegerse y no ser “suprimida ni convertida en un producto comercial”
Recordó que el proceso de dar vida a un ser humano es un acto “natural” en el que las manos del hombre poco deben intervenir.
¿Qué es la gestación subrogada?
La gestación subrogada o “vientres de alquiler” es una práctica de reproducción asistida en la que una mujer gesta en su vientre al hijo de alguien más.
Debido a las dificultades de muchas mujeres para quedar embarazadas y gracias a los avances científicos, esta práctica tomó fuerza y es recurrente también entre parejas de la comunidad LGBTIQ+ que desean ser padres.
Existen diferentes tipos de subrogación, aunque la más practicada es la que utiliza un óvulo de la madre intencional o de una donante y mediante una técnica de fecundación in vitro, implanta el embrión a la gestante.
Gestación subrogada legal
La gestación subrogada comercial es legal en países como Rusia, Ucrania, Israel, Georgia, Kazajistán, Bielorrusia o algunos estados de Estados Unidos.
Es legal solo si se realiza de forma altruista, como ocurre en Canadá, Reino Unido, Grecia, Australia, Brasil, Uruguay, India o Sudáfrica.
En países como Estados Unidos, Australia o México, la legislación no es homogénea y varía en función del territorio.
