El fenómeno de El Niño y los efectos del calentamiento global debido a la actividad humana provocaron un récord de desastres climáticos en Latinoamérica y el Caribe en 2023, indicó la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
El año pasado fue el más cálido del que se tiene registro en la región, que además la organización advirtió que prosiguió el aumento del nivel del mar y el retroceso de los glaciares, y que un gran cambio en la distribución de las precipitaciones causó sequías e incendios forestales, pero también inundaciones y deslaves.
El incremento de estos eventos extremos se le atribuye a la combinación de las condiciones asociadas a El Niño, junto con las consecuencias del cambio climático inducido por los seres humanos.
El Niño es un patrón climático natural asociado al calentamiento de la superficie oceánica en el Pacífico tropical, que suele producirse cada dos a siete años y durar entre nueve y doce meses, y que actualmente tiene lugar en el contexto de un clima alterado por las actividades humanas.
Entre los desastres climáticos de 2023, la OMM destacó el huracán Otis, que devastó Acapulco en octubre dejando al menos 45 muertos y daños millonarios.