
Celaya, Guanajuato
Autoridades de Celaya han iniciado un operativo contra la pirotecnia con el apoyo de Protección Civil, Bomberos, la SEDENA y la Guardia Nacional, enfocándose en mercados y tianguis. Sin embargo, a pesar de denuncias y quema intensa, como la registrada el 12 de diciembre, no se han realizado decomisos ni inspecciones. La dirección de protección civil reiteró que busca concienciar a la ciudadanía sobre los riesgos y exhortó a reportar puntos de venta clandestina.
“Al momento ahorita no se ha tenido compromiso ni aseguramiento de un material pirotécnico.
¿Dónde se ha regresado?
Empiezan los operativos a partir del día lunes, en coordinación con fiscalización, y ahorita personalmente ha sido recorrido sobre las ciudades que andan así, y si vemos algún punto, pues se atiende el reporte, pero no hemos ahorita hecho el inicio del arranque”
Alfonso Santoyo, Director de Protección Civil
El presidente municipal, Juan Miguel Ramírez Sánchez, justificó la inacción señalando que cumplir estrictamente la ley implicaría sancionar a padres, líderes religiosos y feligreses, principales usuarios de pirotecnia en festividades. Propuso abrir un diálogo con ciudadanos, autoridades locales y la SEDENA para revisar la veda establecida tras “el domingo negro de Celaya”. Según el alcalde, la discusión buscaría definir si se endurecen las restricciones o se regula la venta y quema supervisada.
“Porque si nosotros somos estrictos, tendríamos que meter a la cárcel, a sacerdotes, a toda la gente que está alrededor, que son órdenes que organizan las fiestas.
Y luego pareciera que una fiesta es un día. Es un día como quiera que pasa. Hacen recorridos, sacan al santito, salgan a San Miguel y lo llevan a otro barrio”
Juan Miguel Ramírez, Presidente
Según el primer edil, Celaya es el único municipio en la región con prohibición total, mientras localidades vecinas permiten su comercio. El alcalde subrayó la necesidad de abordar el tema de manera integral para evitar la corrupción y garantizar la seguridad, sin ignorar la relevancia cultural de la pirotecnia en celebraciones religiosas, en un esfuerzo por equilibrar tradición y legalidad.