
Celaya, Guanajuato
La Diócesis de Celaya recibió con profundo pesar la noticia del fallecimiento del Papa Francisco, que marca un momento histórico de duelo para la Iglesia. Desde el Obispado se activaron actos litúrgicos en señal de luto. Tales como el doblar de campanas en las ciudades principales y la convocatoria a misas exequiales, siendo la central el próximo domingo al mediodía.
El Obispo Víctor Alejandro Aguilar Ledesma detalló que, aunque no viajarán a Roma, seguirán las ceremonias desde la diócesis. Convocan a la comunidad a orar y agradecer por el legado del Pontífice.
Monseñor Aguilar evocó con emoción sus encuentros con el Papa, especialmente durante la visita “ad limina” hace dos años. Señaló que Francisco mostró especial interés por la situación del Bajío y preguntó directamente por Celaya.
Destacó que el Papa estaba al tanto de la violencia, el fervor religioso y los desafíos sociales de la región, y que mostraba un aprecio genuino por México, en particular por la devoción guadalupana.
“Entonces, a ver, dice, a ver del bajío qué nos dice León, qué nos dice Celaya, traía en papel de las diócesis que estábamos ahí y los obispos. Y bueno, pues ya le platicábamos algunos temas y sí recordaba algunos sucesos de Celaya, de Irapuato, porque sí, pues bueno, aparte de que sí estaba informado y se le informaba con tiempo de las cosas, tenía un grande aprecio sobre todo del Bajío y a México en general por el espíritu guadalupano”
Recordó cómo durante su visita al país, Francisco se conmovió profundamente ante la imagen de la Virgen de Guadalupe, demostrando una conexión espiritual con el pueblo mexicano.
Desde su investidura como obispo, Aguilar Ledesma valoró la influencia de Francisco como guía espiritual, subrayando que su legado mayor es haber sido un Papa de la misericordia. Enfatizó que el Pontífice impulsó una Iglesia sinodal, en camino y abierta al diálogo, dejando una huella imborrable en el corazón del clero y la feligresía de Celaya.