Luego de una estancia de nueve meses en la Estación Espacial Internacional (EEI), los astronautas de la NASA, Sunita Williams y Butch Wilmore por fin regresaron a la Tierra, a bordo de la nave espacial Dragon de SpaceX y un viaje de 17 horas.
Despegaron en junio de 2024 en un vuelo de prueba de la nave espacial Boeing Starliner, que no había transportado personas antes. Su misión estaba programada para durar únicamente ocho días pero se prolongó nueve meses por los problemas técnicos con su nave de regreso a la cápsula del Starliner.
El problema básicamente surgió luego de acoplarse a la Estación Espacial Internacional. Detectaron problemas de propulsión de la nave. Esto impidió su uso seguro para el regreso. La NASA decidió que la Starliner regresaría a la Tierra sin tripulación, dejando a los astronautas en la EEI hasta encontrar una solución segura para su retorno.
Aunque parecía una situación engorrosa, Suni Williams rompió el récord como la mujer con más horas acumuladas en caminatas espaciales. Por otro lado, ambos astronautas participaron en tareas de mantenimiento y experimentos científicos.
La nave Dragon de SpaceX
A pesar de que la NASA estuvo evaluando diversas opciones para regresar a estos dos astronautas; decidió optar por pedir la ayuda de SpaceX, la empresa del magnate y político Elon Musk.
Si bien, podían enviar otra cápsula para su rescate, ya se sabía que el Starliner tenía problemas en la propulsión. Esto hacía la operación insegura y podía arriesgar la vida de los astronautas.
De hecho, la NASA no tiene una nave propia para enviar y traer astronautas pues el programa de Transbordador Espacial fue retirado en 2011. De momento únicamente financian el desarrollo de naves privadas como la Dragon de SpaceX y la Starliner de Boeing a través del programa Commercial Crew.
Por otra parte, la nave Dragon “Freedom” de Space X estaba certificada y disponible para la operación. Y aunque estaba “disponible”, la realidad era que había otras misiones programadas, como Crew-8 y Crew-9, que no podían ser interrumpidas.
La NASA tuvo que esperar a que una cápsula Dragon adecuada estuviera disponible en el momento correcto.
El regreso a Casa
La misión que rescató a los astronautas fue la Crew-9 que originalmente estaba tripulada por cuatro personas, incluía a Zena Cardman y Stephanie Wilson de la NASA. Pero para para acomodar el regreso de Williams y Wilmore, decidieron que solo irían dos astronautas, dejando espacio para los dos tripulantes adicionales.
Así el 18 de marzo de 2025, Nick Hauge comandante de la misión y Aleksandr Gorbunov, especialista en la misión, trajeron de vuelta a Sunita y Butch.
Alrededor de las 5 p.m. hora de Miami la cápsula Crew Dragon comenzó a encender sus motores para iniciar la fase final del viaje: el reingreso. La tensión existía, pues es la etapa más peligrosa en el regreso a casa desde el espacio. Durante esta fase, la cápsula Dragon viajaba a aproximadamente 27.000 kilómetros por hora.
National Geographic indica que al ingresar a las capas más densas de la atmósfera terrestre, el exterior de la nave espacial se calentó hasta alcanzar cerca de 1.900°C debido a la fricción con el aire. Este es uno de los momentos más críticos del descenso, donde el escudo térmico de la nave juega un papel fundamental.
46 minutos después de la maniobra de desorbitación, la cápsula Dragon ha desplegado sus paracaídas para ralentizar su descenso final hacia la superficie del océano.
Tras haber enfrentado esta etapa, los astronautas fueron recibidos a las 5:57 p.m. con la siguiente frase: “Nick, Alec, Butch, Suni, de parte de SpaceX, bienvenidos a casa”.
Los paracaídas principales se desplegaron a 1.800 metros de altitud y por fin, en las aguas del océano Atlántico cerca de las costas de Florida, por fin llegaron a casa.
